jueves, 8 de julio de 2010

MANIFIESTO COMUNISTA

Carlos Marx y Federico Engels

Os horrorizáis de que queramos abolir la propiedad privada. Pero, en vuestra sociedad actual, la propiedad privada está abolida para las nueve décimas partes de sus miembros; precisamente porque no existe para esas nueve décimas partes. Nos reprocháis, pues, el querer abolir una forma de propiedad que no puede existir sino a condición de que la inmensa mayoría de la sociedad sea privada de propiedad.
En una palabra, nos acusáis de querer abolir vuestra propiedad. Efectivamente, eso es lo que queremos.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Defensa del capitalismo
Crecimiento económico
Teóricos y políticos han enfatizado la habilidad del capitalismo para promover el crecimiento económico, tal como se mide por el Producto Interno Bruto (PIB), utilización de la capacidad instalada o calidad de vida. Este argumento fue central, por ejemplo, en la propuesta de Adam Smith de dejar que el libre mercado controle los niveles de producción y de precio, y distribuya los recursos.
Sostienen que el rápido y consistente crecimiento de los indicadores económicos mundiales desde la revolución industrial se debe al surgimiento del capitalismo moderno.3 4 Mientras que las mediciones no son idénticas, aquellos que están a favor argumentan que incrementar el PIB (per capita) ha demostrado empíricamente una mejora en la calidad de vida de las personas, tal como mejor disponibilidad de alimentos, vivienda, vestimenta, atención médica, reducción de horas de trabajo, y libertad de trabajo para niños y ancianos.5
Argumentos favorables al capitalismo también afirman que una economía capitalista brinda más oportunidades a los individuos de incrementar sus ingresos a través de nuevas profesiones o negocios que otras formas de economía. Según esta manera de pensar, este potencial es mucho mayor que en las sociedades feudales o tribales o en las sociedades igualitarias/socialistas.

Anónimo dijo...

Defensa del capitalismo
Crecimiento económico
Teóricos y políticos han enfatizado la habilidad del capitalismo para promover el crecimiento económico, tal como se mide por el Producto Interno Bruto (PIB), utilización de la capacidad instalada o calidad de vida. Este argumento fue central, por ejemplo, en la propuesta de Adam Smith de dejar que el libre mercado controle los niveles de producción y de precio, y distribuya los recursos.
Sostienen que el rápido y consistente crecimiento de los indicadores económicos mundiales desde la revolución industrial se debe al surgimiento del capitalismo moderno.3 4 Mientras que las mediciones no son idénticas, aquellos que están a favor argumentan que incrementar el PIB (per capita) ha demostrado empíricamente una mejora en la calidad de vida de las personas, tal como mejor disponibilidad de alimentos, vivienda, vestimenta, atención médica, reducción de horas de trabajo, y libertad de trabajo para niños y ancianos.5
Argumentos favorables al capitalismo también afirman que una economía capitalista brinda más oportunidades a los individuos de incrementar sus ingresos a través de nuevas profesiones o negocios que otras formas de economía. Según esta manera de pensar, este potencial es mucho mayor que en las sociedades feudales o tribales o en las sociedades igualitarias/socialistas.

Anónimo dijo...

El socialismo real y la pobreza
Para quienes atribuyen la miseria de Cuba al "bloqueo" estadounidense, sería bueno que recordaran idénticas calamidades en los países que abrazaron el "socialismo real":
"Los clásicos del marxismo-leninismo predijeron que el socialismo provocaría un salto adelante del nivel de vida del pueblo…Al contrario de estas promesas, en los últimos 60 años se ha comprobado claramente que el nivel de vida de las poblaciones del "socialismo real" es inferior al de los países capitalistas" (pág. 162).
"En el curso de este medio siglo, la historia nos ha proporcionado laboratorios; en ellos, las comparaciones son posibles. La disparidad entre las condiciones de vida de las dos Coreas o de las dos Alemanias es tan llamativa, que ni la propaganda de la Nomenklatura, ni siquiera ella, intenta negarla. Bajo la monarquía de los Habsburgo y durante el período entre las dos guerras, se consideraba que Bohemia tenía un nivel de vida sensiblemente superior al de Austria. Cuando la propaganda sobre el "florecimiento de la Checoslovaquia socialista" debió cesar, durante la Primavera de Praga, la dirección del Partido Comunista checoslovaco se propuso, abiertamente, la tarea de acercarse al nivel de vida de Austria"
"¿Qué ha sucedido en Corea del Norte, en Checoslovaquia, en la Alemania del Este, en Berlín Este? ¿Han sucedido catástrofes naturales, terremotos, epidemias? Nada de eso; en esos países, simplemente, se ha establecido el "socialismo real o dictatorial"

Anónimo dijo...

Una dificultad que surge al discutir sobre el socialismo es que el socialista
siempre hace comparaciones entre el peor tipo de capitalismo y el mejor
socialismo. Esto es como comparar una manzana totalmente podrida y una mediocre. Al menos, ésta es comible, especialmente si la persona nunca ha probado nada más que manzanas podridas.
Los socialistas, y aun más los comunistas, hacen que la palabra capitalismo
suene como una mala palabra, y aquéllos que lo practican como unos
villanos. Pero existen otras formas de capitalismo, no solo las de tipo
abusivo como en algunas partes de América Latina.
Algunas democracias desarrolladas practican la doctrina capitalista del
Mercado Libre. La idea es que exista competencia entre un capitalista y otro.
Esto provoca la mejora de los productos y el control de precios. El cliente es
el rey.

Anónimo dijo...

Pérdida de libertad:
La falla más notoria del socialismo es la pérdida de libertades que conlleva.
Este es el resultado inevitable del intento de producir una sociedad sin
clases. Es igualmente cierto en formas socialistas moderadas, en las que el gobierno controla la producción y desmotiva la competencia.
En este tipo de gobierno hay un estricto control de la opinión, pues se desea que todos piensen de la misma forma. Se pierde la libertad de expresión.
Cunde el miedo porque la gente teme decir algo que los meta en problemas.
De este temor surgen nuevas pérdidas de libertad, tales como la libertad de movilizarse, de reunirse y de profesar alguna religión y expresarse libremente. La libertad artística igualmente se ve coartada.

Como el socialismo no funciona, el partido necesita de un chivo expiatorio para culparlo de su fracaso. Para los nazis, fueron los judíos. Para los comunistas, es el capitalismo occidental en general. En tal pensamiento, la causa de su pobreza jamás es fruto de su propia gestión política, racismo, corrupción o ética de trabajo que premia la mediocridad. Alguien de afuera siempre la produjo.
Simplemente no funciona:
¿A qué se debe que los izquierdistas de América Latina ignoren las lecciones de la historia? ¿Se han olvidado del día en que el Presidente de Rusia declaró frente al Parlamente: “Enfrentémoslo: el comunismo simplemente no funciona”.
La cruel realidad es que los países empobrecidos que caen en el comunismo, tratando de escapar de la pobreza, generalmente terminan aún más pobres de lo que comenzaron.

Pedro dijo...

Ni defiendo, ni condeno el sistema capitalista, trato de analizar con objetividad sus resultados actuales en el Mundo, que a mi juicio son:

1- Explotación de los estados pobres por los estados ricos, hundiendo en la miseria al pueblo.

2- Anteponer la propiedad privada a la publica y hacer del producto publico propiedad privada, o sea, acumulación de riqueza en los capitalistas.

3- Imponer al pueblo las formas democráticas capitalistas, con la violencia organizada (policía, sicarios, mercenarios y ejércitos).

Concluyendo, que si defender el capitalismo es bueno, tendré que seguir creyendo que ese Dios que nos pintan, no existe.

Salud.

Anónimo dijo...

Hola Pedro, respeto su opinión y coincido con usted en que el Capitalismo arrastra innumerables lastres. Aun así creo que en cualquier caso debemos analizar Capitalismo y Socialismo siempre comparativamente. Creo que no podemos juzgar o cualificar algo sin poseer un patrón de comparación. Supongo que usted no es cubano, y que no ha vivido las realidades sociales de países que se autoproclaman como socialistas. Por ello desde su percepción subjetiva le parece tan malo el capitalismo. Seguramente no pensaría igual luego de vivir durante un añito y bajo las mismas condiciones que la mayoría de las personas en estos países pseudo socialistas. Yo he vivido en dos países Socialistas, entre ellos Cuba, y en tres países capitalistas. Puedo asegurarle que mi balanza se inclina hacia el Capitalismo a pesar de todos sus problemas. El socialismo es un infierno.