Ernesto Pérez Castillo
Ahora resulta que la gran noticia en El Nuevo Herald es que la próxima Feria Internacional del Libro de Miami será inaugurada ni más ni menos que por el mismísimo George W. Bush…
El suceso es tan insólito y tan de mal gusto como el imposible de que una reunión de vacas sea presidida por un carnicero, cuchillo en mano y ataviado con su delantal salpicado de sangre.
Porque, si alguna conexión existe entre Súper W y los libros, y ello no debe ser olvidado nunca, es la despiadada destrucción de más de un millón de libros de la biblioteca Dar al-Kutub wa al-Watha’iq, la Biblioteca Nacional de Bagdad, en medio de la operación “Impacto y pavor”, durante la agresión imperial a Irak.
Entre otros libros, desaparecieron ediciones antiguas de Las mil y una noches, de los tratados matemáticos de Omar Khayyam, los tratados filosóficos de Avicena, Averroes, Al Kindi y Al Farabi, las cartas del Sharif Husayn de La Meca, junto a las obras de escritores universales como Tolstoi, Borges, Sábato, manuales de historia sobre la civilización sumeria...
Hubo piras, en el más autentico estilo hitleriano, para incinerar aquellos libros que no fueron robados, e incluso las evidencias confirman que para el incendio se usó fósforo blanco, de procedencia militar.
Además, en el Museo Arqueológico se saquearon tablillas con las primeras muestras de escritura. Más de 700 manuscritos antiguos fueron a parar a las llamas y 1 500 se dispersaron en la Biblioteca Awqaf. En la Casa de la Sabiduría, cientos de volúmenes fueron igualmente exterminados por el fuego.
Así, la primera gran quema de libros del siglo XXI fue realizada precisamente en la nación donde tuvo lugar la invención del libro, 2 300 años antes del nacimiento de Cristo. Eso lo hizo Bush, y como premio por todo ello ha sido invitado a realizar la apertura de la Feria Internacional del Libro de Miami… ¿dónde si no?
El pretexto para tamaña invitación es el libro de memorias de Súper W, Decision Points, que será entregado a cada uno de los que decidan asistir, a cambio de que abonen los 40 dólares de la entrada, de los cuales 35 pagan el mamotreto en cuestión.
¿De qué trata Decision Points? Dicen que se refiere a los puntos climáticos de sus ocho años de desgobierno: las guerras de Afganistán e Irak, el huracán Katrina y la crisis financiera. Si en esas páginas al menos el 20 o el 30% de lo contado fuera objetivo y verdadero, ello solo bastaría para poner a Súper W tras las rejas de por vida.
A todas estas, la directora ejecutiva del Centro de las Artes Literarias de la Florida, Alina Interián, ha dicho que la presencia de Bush en la inauguración de la feria “habla del prestigio que hemos logrado ganar durante todos estos años”.
Y, mal que le pese, doña Alina lleva mucha razón. El que George W. Bush sea la figura literaria principal en la Feria Internacional del Libro de Miami, dice a las claras qué clase de circo, perdón, qué clase de feria es esa feria de Miami.
Ahora resulta que la gran noticia en El Nuevo Herald es que la próxima Feria Internacional del Libro de Miami será inaugurada ni más ni menos que por el mismísimo George W. Bush…
El suceso es tan insólito y tan de mal gusto como el imposible de que una reunión de vacas sea presidida por un carnicero, cuchillo en mano y ataviado con su delantal salpicado de sangre.
Porque, si alguna conexión existe entre Súper W y los libros, y ello no debe ser olvidado nunca, es la despiadada destrucción de más de un millón de libros de la biblioteca Dar al-Kutub wa al-Watha’iq, la Biblioteca Nacional de Bagdad, en medio de la operación “Impacto y pavor”, durante la agresión imperial a Irak.
Entre otros libros, desaparecieron ediciones antiguas de Las mil y una noches, de los tratados matemáticos de Omar Khayyam, los tratados filosóficos de Avicena, Averroes, Al Kindi y Al Farabi, las cartas del Sharif Husayn de La Meca, junto a las obras de escritores universales como Tolstoi, Borges, Sábato, manuales de historia sobre la civilización sumeria...
Hubo piras, en el más autentico estilo hitleriano, para incinerar aquellos libros que no fueron robados, e incluso las evidencias confirman que para el incendio se usó fósforo blanco, de procedencia militar.
Además, en el Museo Arqueológico se saquearon tablillas con las primeras muestras de escritura. Más de 700 manuscritos antiguos fueron a parar a las llamas y 1 500 se dispersaron en la Biblioteca Awqaf. En la Casa de la Sabiduría, cientos de volúmenes fueron igualmente exterminados por el fuego.
Así, la primera gran quema de libros del siglo XXI fue realizada precisamente en la nación donde tuvo lugar la invención del libro, 2 300 años antes del nacimiento de Cristo. Eso lo hizo Bush, y como premio por todo ello ha sido invitado a realizar la apertura de la Feria Internacional del Libro de Miami… ¿dónde si no?
El pretexto para tamaña invitación es el libro de memorias de Súper W, Decision Points, que será entregado a cada uno de los que decidan asistir, a cambio de que abonen los 40 dólares de la entrada, de los cuales 35 pagan el mamotreto en cuestión.
¿De qué trata Decision Points? Dicen que se refiere a los puntos climáticos de sus ocho años de desgobierno: las guerras de Afganistán e Irak, el huracán Katrina y la crisis financiera. Si en esas páginas al menos el 20 o el 30% de lo contado fuera objetivo y verdadero, ello solo bastaría para poner a Súper W tras las rejas de por vida.
A todas estas, la directora ejecutiva del Centro de las Artes Literarias de la Florida, Alina Interián, ha dicho que la presencia de Bush en la inauguración de la feria “habla del prestigio que hemos logrado ganar durante todos estos años”.
Y, mal que le pese, doña Alina lleva mucha razón. El que George W. Bush sea la figura literaria principal en la Feria Internacional del Libro de Miami, dice a las claras qué clase de circo, perdón, qué clase de feria es esa feria de Miami.
1 comentario:
Y cuando Raul Castro inaugura la feria de La Habana ?es mejor? ?Un tipo que daba tiros de gracia? Un tipo que habla peor que un boxeador de Sagarra?
A la feria de Miami asistiran muchos escritores de calidad. Y habra muchos invitados cubanos. Escritores a los que no te puedes comparar: Antonio Jose Ponte, Gustavo Perez Firmat, Roberto Gonzalez Echevarria, Enrique del Risco. Y otros. Lo de Bush es una de las usuales inconveniencias. Y tu, pobre redactor, cobrando sueldo del general. :)
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