sábado, 26 de junio de 2010

ASESINATOS SIN FIRMAS, SIN CARTAS, SIN MÁS NI MÁS

Ernesto Pérez Castillo

En Pozuelo de Alarcón, España –que no en Cuba–, un inmigrante colombiano lleva más de tres meses –ciento dieciséis días, con sus noches, con su frío, con su calor, con sus lluvias heladas, con sus vientos cortantes– subido a lo alto de las vigas de una grúa, exponiendo jornada tras jornada su vida a más de cuarenta metros del suelo.
Doney Ramírez es el tercer obrero en la protesta, que comenzó desde el lejano febrero su compañero David Cediel y luego Sandy Rafael. ¿Qué exigen? No piden la libertad de nadie, no quieren que el gobierno renuncie, no reclaman nada que no les toque por ley natural. Lo que buscan es sencillo: que se les pague lo que se les debe.
¿Y qué han ganado hasta el sol de hoy? Apenas un par de miserables párrafos en El País, que no se gastó en ellos ni una foto, y los reporta más como curiosidad, por el tiempo sostenido, nunca como una violación fragrante de los derechos del trabajador.
Y pueden darse con un canto en el pecho, pues muy menos que eso han recibido las más de 600 personas que durante 2009 denunciaron haber sufrido torturas y malos tratos en España por parte de las Fuerzas de Seguridad del Estado o los funcionarios de prisiones. De esas denuncias, una docena corresponden a casos de torturas nada menos que en centros de menores.
Quienes ya nada recibirán serán las 41 personas que en el mismo año perdieron la vida mientras se encontraban detenidos o encarcelados bajo custodia estatal.
Aunque la agencia EFE lo reporta, El País ni nadie más los ve, pues lejos de estar a la vista de todo el mundo en las alturas, como Doney, se encontraban tras las rejas y pronto –por obra y gracia de la gran prensa internacional– serán barridos bajo la alfombra sobre la que se juega la copa del mundial de fútbol, de ellos ya nunca nada se sabrá.
¿Y la carta de denuncia, dónde está?
¿Cuándo comienza la campaña por el reclamo de firmas de condena?
¿Dónde están los progres, los intelectuales, los cineastas, los artistas, la farándula que corre a firmar con Prisa cuando sienten que sus contratos flaquean o pueden flaquear?
¿Cuándo se les ocurrirá, ante la evidencia de estos crímenes, crear la Plataforma de Españoles para la Democratización de España?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

justo lo que piden también muchos en Cuba: que se les pague lo que se les debe. ¿Dónde están los progres escritores, los intelectuales, los cineastas, la farándula de Cuba?

Anónimo dijo...

Juan Juan Almeida García, hijo del recién fallecido Comandante de la Revolución Cubana Juan Almeida Bosque, se ha declarado en huelga de hambre desde el día 15 de junio de 2010 dada la constante negativa de salida del país desde el año 2003, y sin explicación del Presidente Raúl Castro, a quien directamente culpa por todas las atrocidades cometidas en su contra.

Ha declarado en innumerables cartas, enviadas a todas las instancias de salud y gubernamentales que sus únicos deseos son viajar al exterior a atenderse la enfermedad degenerativa que padece, cuyo nombre es Espondilits Anquilosante, y abrazar a su esposa e hija. Esta enfermedad degenerativa , que conduce a la pérdida de la posición erecta y al calcinamiento de la base de los pulmones, lo ha llevado a dormir sentado, pues cada día que pasa se agravan los dolores articulares y la misma puede también conducir al desarrollo de uveitis ocular, que no es más que la inflamación de la uvea, una de las capas del ojo. Hace más de diez años que no recibe tratamiento en Bruselas, Bélgica, país al que fue remitido a principios de los años 80, a través de la Cruz Roja Internacional, por la inexistencia en Cuba del tratamiento pertinente.

Hace más de un año Juan Juan tuvo que intentar salir ilegal del país dada esta incoherente actitud de las autoridades cubanas. A raíz de este incidente, ha sido obligado a ir a firmar, por los últimos 15 meses, a Villa Marista, Centro de Detención de la Seguridad del Estado, con el argumento de que pudiese ser procesado.

Su hija y esposa le ruegan al Gobierno Cubano, que tanto ha prometido acometer en pos de una sociedad más humanitaria y democrática, que le permitan salir a tratarse al exterior. Para más informacion, puede contactar a: